namber tú

Aquí hay un cuento. Y un sutil desafío a la autoridad. Porque siempre es super bueno desafiarla. Hay que cuestionarlo todo.
Qué importa si el gusano culiado es grande y tu eres sólo un pergenio en el papel de todos los lápices del mundo, igual podí echarle la puteada porque estoy es como en las películas, a veces: los buenos chicos ganan al final y los brutos grandes, los peces gordos, caen por su propio peso. Los chicos caen por sus centavos que es definitivamente menos que el peso. Lo que falta es que hayan peces lo suficientemente grandes como para que caigan por el dólar. La caída del dolar es algo horrible. A mi no me afecta, pero hablo por todo el resto de la mar infinita que se lleva todos los malos recuerdos que no necesariamente estan representados en el dibujo aquí expuesto, pero sí quizás en las marcas de mordeduras en el lápiz que con tanto ahínco mastiqué deformando, como consecuencia, mi dentadura.
a veces quiero usar frenillos.
pero prefiero ser un geniecillo feo que un geniecillo lindo. nadie puede ser ferpecto.